HECHOS

1. La exposición al ruido puede aumentar el estrés, la ansiedad, la pérdida de sueño y la fatiga.
2. El ruido también puede causar elevación de la presión arterial, enfermedades cardíacas y aumento del ritmo cardíaco.
3. El ruido excesivo durante el embarazo puede dañar la audición del recién nacido.
4. Los hogares y entornos ruidosos pueden interferir en el aprendizaje y el desarrollo del lenguaje en los niños. Incluso una pérdida auditiva leve puede perjudicar la capacidad del niño para hablar, aprender e interactuar con los demás.
5. La pérdida de audición no tratada, especialmente en adultos mayores, puede provocar

• aislamiento social
• depresión
• demencia
• caídas (con lesiones)
• incapacidad para trabajar o viajar
• reducción de la actividad física.

ESTADÍSTICAS

• Cada año, unos 22 millones de trabajadores externos de EE.UU. están expuestos a niveles peligrosos de ruido en el trabajo. Más de 30 millones de trabajadores externos de EE.UU. están expuestos a sustancias químicas, algunas de las cuales son nocivas para el oído (ototóxicas) y peligrosas para la audición.
• Los trabajadores del 75,0 por ciento de los empleos civiles estaban expuestos a niveles de ruido moderados en el trabajo. Otro 13,3 por ciento estaba expuesto a niveles de ruido altos y un 0,7 por ciento a niveles muy altos. Los trabajadores de los sectores de la construcción y la extracción estaban expuestos sobre todo a trabajos ruidosos (49,6 por ciento de los empleos) o muy ruidosos (7,9 por ciento). Más de 7 de cada 10 carpinteros e ingenieros de explotación y otros operadores de equipos de construcción estaban expuestos a entornos de trabajo ruidosos.
• En las ocupaciones relacionadas con la preparación y el servicio de comidas, el 16,5 por ciento de los empleos estaban expuestos a entornos de trabajo ruidosos, y el 82,1 por ciento estaban expuestos a ruidos moderados durante una jornada laboral típica. Los trabajos de camarero se repartían a partes iguales entre trabajadores expuestos a un entorno de trabajo ruidoso (44,7%) o a un entorno de ruido moderado (46,7%).
• Las dos causas más comunes de pérdida de audición son la pérdida de audición inducida por ruido y la pérdida de audición relacionada con la edad.
• La pérdida de audición inducida por el ruido es la enfermedad profesional número uno en Norteamérica.
• Los ruidos superiores a 90 decibelios (dB) pueden provocar pérdida de audición, especialmente cuando la exposición se prolonga durante un periodo de tiempo prolongado.