La falta de capacitación de la empresa provocó la trágica muerte de un trabajador maderero

Los fallos de Sawyer Tree Service hicieron que los trabajadores no fueran conscientes de los peligros que entrañaban las operaciones y las máquinas.

WOODLAWN, Ill. – La muerte de un trabajador de 20 años que falleció al caerle encima un árbol durante las operaciones de tala podría haberse evitado si su empleador hubiera retirado los árboles dañados antes de realizar las operaciones de tala en un terreno de 40 acres en Woodlawn, según determinaron los inspectores federales.

La Administración de Seguridad y Salud Ocupacional del Departamento de Trabajo de Estados Unidos citó a Sawyer Tree Service LLC el 10 de febrero de 2016 por cuatro violaciones graves de seguridad, después de completar su investigación sobre la muerte ocurrida el 11 de agosto de 2015. La tala es una de las ocupaciones más peligrosas de Estados Unidos, con 77 muertes registradas en la industria forestal en 2014, informa la Oficina de Estadísticas Laborales.

“Esta fue una muerte trágica y evitable de un joven que había estado en el trabajo solo dos meses”, dijo Aaron Priddy, director de área de OSHA en Fairview Heights. “Cuando los leñadores utilizan sus herramientas y equipos, se enfrentan a grandes pesos y al impulso de árboles y troncos que caen, ruedan y se deslizan. Capacitar a los trabajadores para reconocer los peligros es vital para prevenir lesiones en esta peligrosa ocupación.”

La agencia descubrió que la empresa con sede en Robinson, que recientemente ha puesto en marcha una división de explotación forestal, estaba en proceso de retirar troncos de dos pistas de tierra en Woodlawn. En el momento del incidente mortal, un segundo empleado estaba manejando un arrastrador de troncos y tirando de dos troncos por un camino cuando los troncos golpearon un árbol dañado haciendo que se desprendiera y cayera. La caída del árbol golpeó al joven, que sufrió lesiones internas mortales.

En su investigación, la OSHA determinó que Sawyer Tree Service debería haber retirado el árbol dañado antes de llevar a cabo las operaciones de tala. La empresa tampoco capacitó a los empleados para manejar el equipo y reconocer los peligros de la tala. La agencia también descubrió que la empresa permitía a los empleados, aparte del operario, viajar en vehículos móviles sin utilizar sistemas de sujeción y cinturones de seguridad. Sawyer tampoco capacitó a sus empleados en primeros auxilios y reanimación cardiopulmonar.