¿QUE ESTÁ EN RIESGO?

El trabajo agrícola es una actividad increíblemente ruidosa. Diferentes tipos de ruidos, como los de las secadoras de grano, los tractores y las herramientas eléctricas, por nombrar algunos, hacen mella en nuestros oídos. Sin embargo, la audición es algo que podemos dar por sentado. Si no entiende cómo afecta negativamente a la audición el exceso de ruido, podría sufrir una pérdida de audición permanente con el tiempo y en distintos grados

¿CUÁL ES EL PELIGRO?

La pérdida de audición en el trabajo es increíblemente común en los agricultores. El ruido constante de los equipos, la maquinaria, las herramientas e incluso los animales afecta a la audición a un ritmo que pasa desapercibido. Alguna vez ha experimentado la incomodidad temporal de los zumbidos en los oídos que se sienten como si estuvieran llenos de algodón. Pero con el tiempo su audición regresa y no piensa más en ello. Lo que ocurre es un lento deterioro de su sentido del oído. Es un proceso gradual, la persona se adapta a la disminución de la audición con el tiempo, pero con el tiempo, se está exponiendo al mismo ruido perjudicial. No se reconoce hasta que el umbral de audición se desplaza hacia arriba y el individuo tiene dificultades para oír cualquier cosa que no esté a un volumen alto. En ese momento, el daño a la audición no se puede revertir.

EJEMPLO

Juan es un agricultor de la vieja escuela. No cree en las normas de los EPP que han sido impuestas por una generación de ” jóvenes débiles “. Nunca se ha molestado en ponerse un juego de orejeras o tapones industriales, a pesar de los constantes intentos de su hijo para que John los utilice. Desgraciadamente, empezó a tener dificultades para oír a su bisnieta contándole cuentos, o a su mujer cantando; y finalmente tuvo que dejar de trabajar porque no podía comunicarse eficazmente con sus trabajadores

COMO PROTEGERSE

El sonido se mide en unidades logarítmicas de presión sonora, conocidas como decibelios, y van de cero a 140. Es sorprendente saber qué puede causar daños en los oídos. Los expertos sugieren que 85 decibelios es el nivel máximo de ruido al que una persona puede exponerse con seguridad en una jornada de 8 horas. Las máquinas estándar, como un tractor sin cabina o una moto de nieve, superan los 100 decibelios de presión sonora. Los establos de ganado durante la época de alimentación son posiblemente más ruidosos que eso.

Como ve, es importante que se informe sobre la cantidad de presión sonora a la que está expuesto. Al hacerlo, podrá tomar las medidas necesarias para proteger su audición en entornos que antes no conocía.

Tome estas medidas para evitar el abuso auditivo en su lugar de trabajo:

• Si es posible, intente limitar el tiempo de exposición al ruido.
• Duplique su distancia con respecto a la fuente de altos decibelios, esto reduce la presión sonora en una cuarta parte.
• Utilice protección auditiva. Asegúrese de hacerlo en todos los trabajos. Los tapones para los oídos ofrecen protección contra el ruido, pero lo ideal son las orejeras acústicas.
• Compruebe su audición. Incluso si cree que su audición está bien. Como se ha mencionado anteriormente, es difícil ser consciente de los daños.

CONCLUSIÓN

La audición es algo muy valioso. Se puede dañar fácilmente de forma gradual y no detectada, y no se puede deshacer. Puede optar por proteger su audición ahora. Con tapones para los oídos u orejeras adecuadas, conociendo los sonidos que pueden ser perjudiciales en su lugar de trabajo y siendo diligente a la hora de distanciarse del ruido, se pueden evitar daños mayores.